EM/SFC en niños: Hoja de datos para profesionales de la educación
La encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica (EM/SFC) puede afectar la experiencia que tenga el niño en la escuela. Esta hoja informativa proporciona información para los profesionales de la educación (como maestros, consejeros y otro personal escolar) sobre cómo brindar apoyo en el ambiente escolar a los estudiantes que tengan EM/SFC y otras afecciones crónicas. Para los fines de esta hoja informativa, se define como adolescentes a los jóvenes de 11 a 18 años y como padres a los adultos que sean los padres o los tutores.
Cómo ayudar a los estudiantes que tengan encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica (EM/SFC)
Cuando se enseñe a adolescentes y niños con EM/SFC, puede ser útil saber más sobre los problemas que enfrentan estos estudiantes. Una clave para ayudar a los estudiantes con EM/SFC es trabajar en equipo con sus maestros y padres, y con los administradores y otros profesionales de la educación y la salud. Este enfoque de equipo puede proporcionar flexibilidad con los planes de educación y los recursos escolares, que se pueden adaptar y personalizar para que se centren y reflejen las necesidades del estudiante.
La EM/SFC afecta de manera diferente a cada estudiante. Cada niño puede presentar síntomas diferentes y la duración de los síntomas también puede variar. Los síntomas pueden variar de un día al otro y de una semana a la otra, lo cual afecta su capacidad de asistir a la escuela regularmente y de tener constancia en su desempeño.
La EM/SFC puede afectar a los niños y los adolescentes de varias maneras, que incluyen:
- Su asistencia
- Su capacidad para participar tanto dentro como fuera de la clase
- Las relaciones con sus compañeros y amigos
- Su capacidad de completar las tareas
- Su éxito escolar en general
Entienda cómo la EM/SFC afecta a los estudiantes dentro y fuera de la clase
Los maestros y administradores que no estén familiarizados con esta enfermedad podrían confundir la enfermedad y la fatiga del niño con pereza o evitación de la interacción social. Estos son algunos ejemplos de cómo la EM/SFC puede afectar a los estudiantes:
- Los síntomas, como los problemas de memoria o concentración, la falta de sueño reparador y los dolores de cabeza pueden afectar tanto la asistencia a la escuela como el rendimiento del estudiante en la escuela.
- Los adolescentes y los niños pueden presentar problemas cuando intentan hacer varias cosas a la vez, por ejemplo, hacer la tarea y llevar la cuenta del tiempo que pasa.
- Muchos de los niños con EM/SFC presentan síntomas más intensos en las horas de la mañana y pueden tener dificultad para llegar a la escuela a tiempo o para mantenerse atentos en la escuela durante la mañana.
- Los niños con EM/SFC pueden presentar problemas de atención, evitación de la interacción social de respuesta, el tiempo de procesamiento de información y con el recuerdo diferido de información verbal o visual.
- Los maestros con estudiantes que tengan estos síntomas podrían notar que pueden completar las tareas correspondientes al nivel de grado, pero que quizás necesiten más tiempo para hacerlo.
Consejos para maestros y administradores*
Debido a que la EM/SFC es un trastorno complejo que afecta la manera en que los estudiantes aprenden y participan en la escuela, se recomienda que los maestros y administradores sean creativos cuando elaboren estrategias para fomentar un ambiente educativo favorable para los estudiantes que tienen esta afección. Los maestros y administradores podrían:
- Ayudar a los estudiantes con los apuntes.
- Darles más tiempo para los exámenes y las tareas.
- Programar periodos de descanso durante la clase o durante el día.
- Evitar darles demasiada información junta.
- Estar dispuestos a que combinen clases en la escuela con clases particulares en la casa.
- Permitir que los estudiantes asistan a la escuela por periodos más cortos en vez del día entero, según sea necesario.
- Si el médico de un estudiante lo recomienda, permitir que participe en clases de educación física modificadas o eximirlo de la clase, si es necesario.
- Darles un juego de libros extra para que tengan en la casa.
- Ofrecer y motivarlos a que usen organizadores, agendas y otras herramientas para el manejo del tiempo.
*NOTA: La lista anterior no es exhaustiva. Los maestros y administradores quizás necesiten explorar otras estrategias para acomodar las necesidades particulares de cada uno de los estudiantes con esta enfermedad.