Información sobre la anoftalmía y la microftalmia

La anoftalmía y la microftalmia son defectos de nacimiento en los ojos del bebé. La anoftalmía es un defecto de nacimiento en el cual el bebé nace sin uno o ambos ojos. La microftalmia es un defecto de nacimiento en el cual uno o ambos ojos no se desarrollaron completamente, y por lo tanto son pequeños.

¿Qué es la anoftalmía y la microftalmia?

La anoftalmía y la microftalmia se producen durante el embarazo y pueden presentarse solas, con otros defectos de nacimiento o como parte de un síndrome. El resultado de la anoftalmía y de la microftalmia generalmente es la ceguera o la visión limitada.

Causas y factores de riesgo

Se desconocen las causas de la anoftalmía y la microftalmia en la mayoría de los bebés. Algunos bebés tienen anoftalmía o microftalmia debido a un cambio en sus genes o cromosomas. La anoftalmía y la microftalmia también pueden ser causadas por tomar ciertos medicamentos, como isotretinoína (Accutane®) o talidomida, durante el embarazo. Estos medicamentos pueden causar un patrón de defectos de nacimiento, que puede incluir la anoftalmía o la microftalmia. Estos defectos también pueden ser causados por una combinación de genes y otros factores, como los elementos dentro del ambiente con los que la madre entre en contacto, o lo que coma o beba, o ciertos medicamentos que use durante el embarazo.

Al igual que muchas de las familias de niños con un defecto de nacimiento, los CDC quieren saber qué los causa. Comprender qué factores son más comunes entre los bebés con defectos de nacimiento nos ayudará a aprender más sobre las causas. Los CDC continúan estudiando los defectos de nacimiento, como la anoftalmía y la microftalmia, y la forma de prevenirlos.

Si usted está embarazada o está pensando en quedar embarazada, hable con su médico sobre las maneras de aumentar las probabilidades de tener un bebé sano.

Diagnóstico

La anoftalmía y la microftalmia se pueden diagnosticar tanto durante el embarazo como después del nacimiento del bebé. Durante el embarazo, los médicos generalmente pueden identificar la anoftalmía y la microftalmia mediante una ecografía o una tomografía computada (una prueba radiográfica especial), y a veces con ciertas pruebas genéticas. Después del nacimiento, el médico puede identificar la anoftalmía y la microftalmia mediante el examen del bebé. El médico también hará un examen físico integral para observar si hay otros defectos de nacimiento presentes.

Tratamiento

No existe un tratamiento disponible con el cual se pueda crear un nuevo ojo o se pueda restaurar la visión completa de aquellas personas afectadas por la anoftalmía o microftalmia. Los bebés que nazcan con una de estas afecciones deben ser vistos por un equipo de médicos especiales de los ojos:

  • Un oftalmólogo, que es un médico con capacitación especial en el cuidado de los ojos.
  • Un ocularista, que es un proveedor de atención médica con capacitación especial en la fabricación y la colocación de ojos prostéticos.
  • Un cirujano oculoplástico, que es un médico que se especializa en la cirugía de los ojos y de la cuenca de los ojos.

Las cuencas de los ojos son muy importantes para que la cara del bebé se desarrolle y crezca adecuadamente. Si un bebé tiene una de estas afecciones, los huesos que le dan forma a la cuenca del ojo podrían no crecer adecuadamente. A los bebés se les puede colocar una estructura de plástico llamada conformador, que puede ayudar a que la cuenca del ojo y los huesos crezcan adecuadamente. A medida que el bebé crezca, estos dispositivos deberán agrandarse para que ayuden a expandir la cuenca del ojo. Asimismo, cuando el niño crezca se le podrá colocar un ojo artificial.

Los niños con estas afecciones deben ser monitoreados frecuentemente por un equipo de especialistas en los ojos desde temprano en la vida. Si surgen otras afecciones, como una catarata o el desprendimiento de la retina, el niño podría necesitar cirugía para reparar esas afecciones. Si la anoftalmía o la microftalmia afecta solamente un ojo, el oftalmólogo podría sugerir formas de proteger y preservar la vista del ojo sano. Según la gravedad de la anoftalmía o la microftalmia del niño, podría necesitar cirugía. Es importante hablar con el equipo de especialistas de los ojos para determinar el mejor plan de acción.

La terapia e intervención temprana pueden frecuentemente beneficiar a los bebés que nacen con estas afecciones, ya que los ayudan con el desarrollo y la movilidad.