Pruebas de detección de defectos cardiacos de nacimiento graves

Importancia de las pruebas para detectar defectos cardiacos de nacimiento graves en los recién nacidos

Pulse oximeter on baby's toe

La realización de pruebas para detectar defectos cardiacos de nacimiento graves puede ayudar a identificar a algunos bebés que tengan estos defectos antes de que los dejen salir del hospital en el que nacieron. Esto les permite a esos bebés recibir tratamiento de forma temprana y podría prevenir discapacidades o la muerte en las primeras etapas de su vida.

Cantidad de bebés que las pruebas de detección pueden ayudar

Algunos bebés con un defecto cardiaco de nacimiento grave parecen sanos al principio y podrían ser enviados a su casa antes de que el defecto sea detectado. La realización de pruebas para detectar defectos cardiacos de nacimiento graves en los recién nacidos es una herramienta que se usa, junto con los diagnósticos prenatales y los exámenes físicos después del nacimiento, para mejorar la detección de estos defectos. La cantidad de bebés con un defecto cardiaco de nacimiento grave no diagnosticado que podrían ser identificados mediante la pulsioximetría depende del nivel de atención neonatal y el tipo de defecto cardiaco de nacimiento grave, entre otros factores.1

Los CDC estiman que aproximadamente 875 recién nacidos más con defectos cardiacos de nacimiento graves podrían ser identificados en los hospitales en los que nacieron mediante la pulsioximetría cada año, pero una cantidad igual (880 bebés) podrían no ser detectados cada año en los Estados Unidos, que en su mayoría tienen un tipo de defecto cardiaco de nacimiento grave (la coartación de la aorta u el arco aórtico interrumpido, la tetralogía de Fallot, o la dextrotransposición de las grandes arterias) que tienen menos probabilidad de ser dectectados mediante la pulsioximetría.2

La historia de Jodi

“Después de un embarazo normal, nació Alex a las 40 semanas por cesárea. Al principio parecía que todo estaba bien. Luego de tener a Alex un rato con nosotros, se lo llevaron a la sala de recién nacidos para bañarlo, pero a las 3 horas todavía no estaba de vuelta. Finalmente, el pediatra vino y nos explicó que cuando una enfermera lo estaba vistiendo para traerlo a la habitación, notó que se le estaban poniendo azules los lechos de las uñas. Entonces le hizo una prueba de pulsioximetría.

Jodi

Sin tener idea de lo que me estaba diciendo, le dije que mi marido y yo teníamos asma desde la infancia. Me contestó que seguramente no era ese el problema y que creían que podría tratarse de un problema con el corazón. Luego de un tiempo breve y un ecocardiograma, determinaron que Alex tenía atresia tricuspídea con atresia pulmonar.

En los primeros meses de vida, Alex tuvo dos operaciones a corazón abierto, y necesitará una tercera operación. Pero ahora Alex es un niño activo y juguetón. Camina, corre, habla, come, se ríe y hasta está tratando de aprender a dejar los pañales solito. También le gusta leer y jugar con su hermana. A pesar de que hemos pasado por un torbellino de emociones, no puedo imaginarme lo diferente que sería nuestra vida si esa enfermera no hubiera notado el cambio de color y si no hubiese revisado su nivel de oxígeno.”

Importancia de diagnosticar un defecto cardiaco de nacimiento grave antes de que el bebé salga del hospital

Cuando los bebés con un defecto cardiaco de nacimiento grave no diagnosticado salen del hospital, podrían tener problemas muy serios, como el colapso cardiaco (cuando el corazón de un bebé deja de funcionar de forma adecuada y no puede llevar oxígeno al resto del cuerpo) o la muerte dentro de los primeros días o las primeras semanas que estén en su casa. Si se diagnostica un defecto cardiaco de nacimiento grave antes de que el bebé salga del hospital, los médicos pueden proporcionar la atención y el tratamiento que podrían prevenir problemas de salud o incluso la muerte más adelante. También pueden planificar mejor el tratamiento para un bebé con un defecto cardiaco de nacimiento grave, al ayudarlo con una operación u otro tratamiento cuando esté estable, y no en una situación de emergencia. Los bebés a los que se les ha diagnosticado un defecto cardiaco de nacimiento grave después de haber salido del hospital tienden a volver para ser hospitalizados con más frecuencia, pasar más tiempo en el hospital y tener costos de hospitalización más altos, en comparación con los bebés a los que se les diagnosticó un defecto cardiaco de nacimiento grave cuando todavía estaban en el hospital después de nacer.2

La realización de pruebas mandatas para detectar defectos cardiacos de nacimiento graves mediante la pulsioximetría reduce en un 33% las muertes prematuras de bebés por defectos cardiacos de nacimiento graves, o 120 muertes prematuras de bebés por defectos cardiacos de nacimiento graves prevenidas cada año.4

Costos

Siempre hay costos cuando se realizan pruebas de detección. El costo de la prueba para detectar un defecto cardiaco de nacimiento grave depende de muchos factores, como la cantidad de nacimientos que haya en el hospital, el tipo de equipo que se use y cuánto tiempo lleve realizar la prueba.5-7

Otros costos, además de los de la prueba misma, también son importantes. Los bebés que no pasen la prueba de pulsioximetría para detectar un defecto cardiaco de nacimiento grave necesitarán otras pruebas, podrían pasar más tiempo en el hospital o podrían ser trasladados a otro hospital para recibir tratamiento especializado. Se deben considerar estos costos en el momento de evaluar los costos totales de los programas de detección de defectos cardiacos de nacimiento graves. Sin embargo, si los médicos confirman que el bebé tiene un defecto cardiaco de nacimiento grave, el niño recibirá la atención que necesite de manera oportuna y posiblemente se eviten otros costos como los de los cuidados de emergencia.

En general, la prueba de pulsioximetría es eficaz en función del costo, lo cual significa que los beneficios para la salud de esas pruebas superan los costos.8 Los CDC estiman que cada año de vida adquirida con las pruebas para detectar defectos cardiacos de nacimiento graves cuestan $12,000.8-9

Referencias

  1. Dawson AL, Cassell CH, Riehle-Colarusso T, Grosse SD, Tanner JP, Kirby RS, Watkins SM, Correia JA, Olney RS. Factors associated with late detection of critical congenital heart disease. Pediatrics. 2013; 132: e604-11.
  2. Ailes EC, Gilboa SM, Honein MA, Oster ME. Estimated Number of Infants Detected and Missed by Critical Congenital Heart Defect Screening. Pediatrics. 2015;135(6):1000-1008.
  3. Peterson C, Dawson A, Grosse SD, Riehle-Colarusso T, Olney RS, Tanner JP, Kirby RS, Correia JA, Watkins SM, Cassell CH. Hospitalizations, costs, and mortality among infants with critical congenital heart disease: How important is timely detection? Birth Def Res A Clin Mol Teratol. 2013;97(10):664-72.
  4. Abouk R, Grosse SD, Ailes EC, Oster ME. Association of US State Implementation of Newborn Screening Policies for Critical Congenital Heart Disease With Early Infant Cardiac Deaths. JAMA. 2017; 318(21): 2111-2118.
  5. Mahle WT, Newburger JW, Matherne GP, Smith FC, Hoke TR, Koppel R, Gidding SS, Beekman RH 3rd, Grosse SD. American Heart Association Congenital Heart Defects Committee of the Council on Cardiovascular Disease in the Young, Council on Cardiovascular Nursing, and Interdisciplinary Council on Quality of Care and Outcomes Research; American Academy of Pediatrics Section on Cardiology and Cardiac Surgery; Committee on Fetus and Newborn. Role of pulse oximetry in examining newborns for congenital heart disease: a scientific statement from the AHA and AAP. Pediatrics. 2009; 124:823-36.
  6. De-Wahl Granelli A, Wennergren M, Sandberg K, Mellander M, Bejlum C, Inganas L, Eriksson M, Segerdahl N, Agren A, Ekman-Joelsson BM, Sunnegardh J, Verdicchio M, Sotman-Smith I. Impact of pulse-oximetry screening on the detection of duct-dependent congenital heart disease: a Swedish prospective screening study in 39,821 newborns. BMJ. 2009; 338:a3037.
  7. Peterson C, Gross SD, Glidewell J, Garg LF, Van Naarden Braun K, Knapp MM, Beres LM, Hinton CF, Olney RS, Cassell CH. A public health economic assessment of hospitals’ cost to screen newborns for critical congenital heart disease. Public Health Rep. 2014;129(1):86-93.
  8. Peterson C, Grosse SD, Oster ME, Olney RS, Cassell CH. Cost-effectiveness of routine screening for critical congenital heart disease in US newborns. Pediatrics. 2013; 132:e595-603.
  9. Grosse SD, Abouk R, Glidwell J, Oster ME. International Journal of Neonatal Screening. 2017; 3, 34.