Complicaciones inesperadas durante el embarazo: la historia de Allyson Felix

Allyson es una atleta de élite y deportista olímpica a la que a las 32 semanas de embarazo le diagnosticaron preeclampsia grave: una complicación potencialmente mortal, relacionada con el embarazo. Debido a su excepcional estado físico y considerable nivel de entrenamiento, se sorprendió cuando, en un chequeo prenatal, se enteró de que tenía los niveles de proteína en la orina elevados y que tenía presión arterial alta. Su médico la hospitalizó para hacerle más pruebas y monitorearla. Después le tuvieron que hacer una cesárea de emergencia. Es posible que las medidas rápidas que tomó su médico le hayan salvado la vida.

La historia de Allyson no es única. Cada año, muchas personas presentan problemas de salud graves e inesperados relacionados con el embarazo. Algunas podrían tener consecuencias a largo plazo para la salud y puede que otras no sobrevivan. Cada año, en los Estados Unidos ocurren demasiadas muertes debido a las complicaciones relacionadas con el embarazo o el parto. Cada muerte es una tragedia, especialmente cuando sabemos que más del 80 % de las muertes relacionadas con el embarazo podrían haberse prevenido.

Las mujeres de raza negra tienen 3 veces más probabilidades de morir por una complicación relacionada con el embarazo que las mujeres de raza blanca.

Una conversación de los CDC con Allyson Felix

Allyson se sentía preparada: es atleta profesional, tenía un plan para el parto, estaba yendo a las citas prenatales y a clases de preparación para dar a luz, y había entrenado durante todo el embarazo. Nunca imaginó que tendría un problema grave durante su embarazo. Sin embargo, cuando faltaban dos meses para su fecha prevista de parto, le diagnosticaron preeclampsia grave y tuvo que ser hospitalizada de inmediato, lo cual terminó en una cesárea de emergencia.

Su hija, Camryn, pesó 3 libras, 7 onzas al nacer y tuvo que pasar su primer mes de vida en la unidad de cuidados intensivos neonatales. Afortunadamente, Camryn es ahora una niña pequeña que crece sana, y Allyson es una mamá sana y orgullosa, y una campeona de la salud materna. También se enfoca en aumentar la concientización sobre la mayor carga de resultados negativos del embarazo entre las mujeres de raza negra, con la esperanza de ayudar a generar un cambio.

Allyson se unió a la campaña de los CDC Hear Her (Escúchela) para compartir su historia y ayudar a educar a las personas embarazadas o en etapa de posparto, y a todos los que las apoyan, acerca de los signos de advertencia de una urgencia de complicaciones relacionadas con el embarazo.

“Realmente quiero que las mujeres sean conscientes, que sepan si están en riesgo, que tengan un plan establecido, que no se sientan intimidadas en el consultorio del médico, y que sean escuchadas. Que sepan cuáles son los signos y que insistan acerca de cualquier cosa que no se sienta normal”.

¿Qué es la preeclampsia?

La preeclampsia es un trastorno que por lo general ocurre después de la semana 20 del embarazo y que se caracteriza por la aparición repentina de presión arterial alta y signos de daño a los órganos, como el hígado y los riñones.

Los síntomas de la preeclampsia incluyen:

Dolor de cabeza que no desaparece

  • Cambios en la visión o la vista, como tener visión borrosa, ver puntitos
  • Dolor en la parte superior del estómago
  • Náuseas o vómitos
  • Hinchazón de la cara o las manos
  • Aumento repentino de peso
  • Dificultad para respirar