El VIH y el consumo de sustancias

El VIH y el consumo de sustancias

Los trastornos de consumo de sustancias, que son patrones problemáticos de consumo de alcohol u otras sustancias —como cocaína crack, metanfetaminas (“meth”), nitrito de amilo (“poppers”), opioides recetados y heroína—, están estrechamente asociados al VIH y a otras enfermedades de transmisión sexual.

Infórmese sobre su nivel de riesgo y cómo reducirlo

El consumo de drogas inyectables, puede ser una vía de transmisión directa del VIH si se comparten agujas, jeringas u otros implementos de inyección contaminados con el VIH. Sin embargo, beber alcohol e ingerir, fumar o inhalar drogas está asociado, también, a un mayor riesgo de contraer o transmitir el VIH. Estas sustancias alteran el juicio de las personas; esto puede llevarlas a tener comportamientos sexuales riesgosos (p. ej., tener relaciones sexuales sin condón o tener múltiples parejas sexuales), y estos comportamientos pueden aumentar sus probabilidades de contraer o transmitir el VIH.

En las personas que tienen el VIH, el consumo de sustancias puede acelerar la evolución de la enfermedad, afectar la adherencia a la terapia antirretroviral (medicamentos para el VIH) y empeorar las consecuencias del VIH en general.

Las sustancias comúnmente consumidas y el riesgo de infección por el VIH 

  • Alcohol. El consumo de alcohol en exceso, especialmente en atracón, puede ser un factor de riesgo importante porque se vincula a comportamientos sexuales riesgosos y, entre las personas con VIH, puede perjudicar el resultado del tratamiento.
  • Opioides. Los opioides, una clase de droga que reduce el dolor, incluyen tanto a los medicamentos recetados como a la heroína. Se asocian a comportamientos de riesgo de transmisión del VIH, como compartir agujas estando infectado y tener relaciones sexuales riesgosas, y se han vinculado a un reciente brote de VIH.
  • Metanfetaminas. El “meth” ha sido vinculado a comportamientos sexuales riesgosos que ponen a las personas en mayor riesgo de infección por el VIH. Puede ser inyectado, lo cual también aumenta el riesgo de transmisión del VIH si se comparten las agujas y los otros implementos de inyección.
  • Cocaína crackLa cocaína crack es un estimulante que puede crear un ciclo de agotamiento rápido de recursos y búsqueda de otras formas de conseguir la droga, lo cual incluye intercambiar sexo por drogas o dinero, lo que, a su vez, incrementa el riesgo de infección por el VIH.
  • Sustancias inhalantes. El consumo de nitrito de amilo (“poppers”) ha sido asociado por mucho tiempo a comportamientos sexuales riesgosos, al consumo de drogas ilegales y a enfermedades de transmisión sexual entre los hombres gais y bisexuales.