Exposición a cueros (pieles de animal)/tambores

El riesgo de contraer ántrax (ántrax maligno o carbunco) al manipular un tambor de cuero es muy bajo. Sin embargo, ha habido casos de personas en los Estados Unidos y en otras partes del mundo que se han enfermado de ántrax después de manipular tambores de cuero.

En los Estados Unidos, el primer caso documentado de ántrax asociado a un tambor de cuero fue en la Florida en 1974. Un solo caso de ántrax cutáneo se asoció a un bongó fabricado con piel de cabra que había sido comprado en Haití, donde el ántrax es común.

Otro caso mortal de ántrax por inhalación ocurrió en Escocia en el 2006. El paciente, que quizás tenía una mayor propensión a las enfermedades infecciosas, se enfermó después de usar o manipular tambores fabricados con pieles o cueros de animales contaminados del oeste de África.

grupo de personas jugando tambores de piel natural

El riesgo de exposición a las esporas del ántrax durante un evento musical con tambores también se considera muy bajo. Aunque se identificó un caso reciente de ántrax gastrointestinal en una persona que asistió a un evento musical con tambores en un recinto cerrado, este caso todavía se está investigando y no se ha determinado la manera en que esta persona se infectó.

Si usted tiene o toca tambores fabricados con cuero o piel de animales, o asistió recientemente a un evento con tambores y presenta algún síntoma que se parezca al ántrax, debe buscar atención médica lo antes posible. Es importante que informe a su proveedor de atención médica sobre cualquier contacto reciente que haya tenido con algún tambor de cuero.

No hay riesgo asociado a la manipulación de pieles o cueros de animales sanos, ni de tambores fabricados con este material. Los cueros (pieles) provenientes de países donde el ántrax es común pueden presentar un riesgo más alto de exposición al ántrax que los originarios de los Estados Unidos.

La mejor manera de garantizar que los tambores no hayan sido fabricados con cuero de animales contaminados es asegurarse de que el material proceda de estas fuentes:

  • Animales provenientes de los Estados Unidos.
  • Animales que hayan sido importados con un certificado veterinario internacional que acredite que han pasado por las inspecciones gubernamentales adecuadas.
  • Animales sanos

No se permite el ingreso de pieles o cueros de animales a los Estados Unidos a menos que hayan sido tratados para que haya menos probabilidades de que propaguen enfermedades. Las personas que fabrican o tocan tambores de cuero deben decírselo a su médico si tienen fiebre o presentan lesiones en la piel.

No hay pruebas disponibles para determinar si un producto animal no está contaminado con esporas del ántrax. Asegúrese de que el cuero que se use para fabricar un tambor se haya retirado y procesado de acuerdo con las normas gubernamentales existentes.