Diagnóstico del trastorno obsesivo compulsivo (TOC)

Las personas con comportamientos obsesivo compulsivos tienen pensamientos indeseados (obsesiones) ante los cuales sienten la necesidad de reaccionar (compulsiones).

Para ayudar a diagnosticar el trastorno obsesivo compulsivo (TOC), los profesionales de la salud mental usan la quinta edición del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5, por sus siglas en inglés)1 de la Asociación Estadounidense de Siquiatría.

A continuación presentamos los criterios de diagnóstico de manera resumida. Por favor, tenga en cuenta que están aquí solo para que usted se informe y que no deben usarse para autodiagnosticarse. Si tiene inquietudes sobre alguno de los síntomas enumerados, debe consultar con un proveedor de atención médica capacitado y con experiencia en el diagnóstico y tratamiento del TOC.

Las obsesiones se definen según los dos aspectos siguientes:

  • Pensamientos, impulsos o imágenes mentales que se repiten constantemente. Estos pensamientos, impulsos o imágenes mentales son indeseados y causan mucha ansiedad o estrés.
  • La persona que tiene estos pensamientos, impulsos o imágenes mentales trata de ignorarlos o de hacer que desaparezcan.

Las compulsiones se definen según los dos aspectos siguientes:

  • Conductas (por ejemplo, lavarse las manos, colocar cosas en un orden específico o revisar algo una y otra vez como cuando se verifica constantemente si una puerta está cerrada) o pensamientos (por ejemplo, rezar, contar números o repetir palabras en silencio) que se repiten una y otra vez o según ciertas reglas que se deben seguir estrictamente para que la obsesión desaparezca.
  • La persona siente que el propósito de estas conductas o pensamientos es prevenir o reducir la angustia, o evitar una situación o acontecimiento temido. Sin embargo, estas conductas o pensamientos no tienen relación con la realidad o son claramente exagerados.

Además, se deben cumplir las siguientes condiciones:

  • Las obsesiones o compulsiones consumen mucho tiempo (más de una hora por día), o causan una intensa angustia o interfieren en forma significativa con las actividades diarias de la persona.
  • Los síntomas no se deben al consumo de medicamentos u otras drogas ni a otra afección.
  • Si la persona padece otro trastorno al mismo tiempo, las obsesiones o compulsiones no se pueden relacionar tan solo con los síntomas del trastorno adicional. Por ejemplo, para recibir el diagnóstico del TOC, una persona que padezca un trastorno de la alimentación también debe tener obsesiones o compulsiones que no se relacionen solo con los alimentos.

El diagnóstico también debe indicar si la persona con TOC comprende que los pensamientos obsesivo compulsivos pueden no ser ciertos, o si está convencida de que son verdaderos (por ejemplo, es posible que alguien sepa que no es necesario revisar la estufa [cocina] 30 veces, pero que sienta que debe hacerlo de todas maneras).

El diagnóstico también debe indicar si una persona con TOC tiene o ha tenido un trastorno de tic. Las personas con TOC y con trastornos de tics tienden a diferenciarse de aquellas sin antecedentes de trastornos de tics respecto de sus síntomas, la presencia de otros trastornos y la manera en que se manifiesta el TOC en la familia.

Referencia

  1. American Psychiatric Association. Diagnostic and statistical manual of mental disorders, fifth edition: DSM-5.  Washington, DC: 2013.