Recomendaciones para inmigrantes de países donde el paludismo es endémico que planean regresar a “casa” para visitar a amigos y familiares

No hay una razón única por la cual los viajeros VFR tengan un mayor riesgo de contraer infección por paludismo. Existen muchos factores que contribuyen a este aumento en el riesgo; es posible que no todos ellos estén relacionados con todos los viajeros VFR.

• La duración del viaje tiende a ser mayor que la de otros tipos de viajes como, por ejemplo, la de viajes de negocio o por paquetes turísticos.
• Es más probable que cuando visiten a amigos o parientes, los viajeros VFR se queden en sus casas en vez de en hoteles. Dependiendo del lugar de destino o de la situación socioeconómica, es menos probable que las residencias privadas tengan aire acondicionado o ventanas con mallas contra insectos.

• Es menos probable que los viajeros VFR tomen las medidas que se recomiendan para prevenir el paludismo, lo que los pone en un mayor riesgo de infección comparado con otros tipos de viajeros que es más probable que usen repelentes de insectos y tomen medicamentos quimioprofilácticos.

  Una vez más, las razones son complejas, pero pueden incluir ciertos factores socioeconómicos, como el acceso a la atención médica. Es posible que algunos inmigrantes recién llegados no tengan seguro médico o no hayan establecido una relación con un proveedor de atención primaria, lo cual limita las oportunidades de recibir adecuadas intervenciones médicas preventivas, incluida la prevención contra el paludismo.

• Otro factor importante es que algunos viajeros VFR tienen una percepción equivocada del riesgo. Algunos viajeros VFR consideran que tienen poco o ningún riesgo de infección debido a que crecieron en un país donde el paludismo es endémico y se consideran inmunes a esta enfermedad. Esto incluye la creencia de que si contraen la infección, esta será leve y fácil de tratar con medicamentos que adquieran en el extranjero.

  Sin embargo, los viajeros VFR deben saber que la inmunidad parcial que puedan haber desarrollado al crecer en un país donde el paludismo es endémico se pierde rápidamente después de mudarse, lo que los hace tan vulnerables a la infección como las personas que crecieron en países donde el paludismo no es endémico. Los hijos y cónyuges que puedan acompañarlos en el viaje tampoco tendrán ninguna inmunidad contra el paludismo. Además, dependiendo del lugar de destino, es posible que no todos los medicamentos que estén disponibles en el extranjero para tratar el paludismo sean adecuados o eficaces.

No. Simplemente tienen que tomar las mismas medidas preventivas que se recomiendan para todos los viajeros. Deben evitar las picaduras de mosquitos usando un repelente de insectos recomendado (especialmente si salen de noche) y dormir bajo un mosquitero para camas, tratado con insecticida, si van a quedarse en un lugar al aire libre. También deben empezar a tomar uno de los medicamentos quimioprofilácticos recomendados para el lugar de destino antes, durante y por el tiempo completo que se indique después del viaje.